La tendencia ascendente de compartir nuestras viviendas con animales de compañía ha despertado interrogantes acerca de los derechos de los arrendatarios y las responsabilidades de los dueños. ¿Es justo restringir las mascotas en un apartamento de renta?
La ley española y los animales de compañía
La Ley de Protección Animal, ratificada en 2023, considera a las mascotas como integrantes de la familia. No obstante, la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) no dicta una normativa concreta acerca de la tenencia de animales en hogares rentados. Lee más sobre las legislaciones.
¿Qué establece el contrato de alquiler?
El secreto reside en el contrato de alquiler. Si el contrato establece de manera explícita la prohibición de tener animales de compañía, el propietario puede exigir que se cumpla esta condición. Sin embargo, esta restricción tiene que estar explícitamente definida y no puede contradecir otros derechos esenciales, como el derecho a la vivienda.
¿Qué pasa si el contrato no lo especifica?
Si el acuerdo no menciona a las mascotas, inicialmente, el arrendatario puede tener una mascota, siempre que esta no genere inconvenientes a los vecinos o perjuicios a la propiedad.
¿Qué sucede si tengo una mascota y el acuerdo lo impide?
En este escenario, el dueño podría comenzar un procedimiento de desahucio por violación del contrato. No obstante, se aconseja buscar una solución negociada, como proporcionar un depósito extra o adquirir un seguro para resguardar eventuales perjuicios o posibles daños causados por tu mejor amigo.
Excepciones
Hay ciertas excepciones a la restricción de las mascotas. Los perros orientados para individuos con dificultades visuales, por ejemplo, poseen el derecho de entrar a cualquier sitio, incluso si el contrato de renta lo impide.
¿Qué tengo que considerar?
- Interactúa con el dueño: Antes de alquilar una casa, es aconsejable hablar con el dueño (o la agencia) acerca de la opción de adoptar una mascota.
- Examina con cuidado el contrato: Verifica que comprendas todo lo que pone en el contrato, en particular las vinculadas a las mascotas.
- Mantén respeto hacia tus vecinos: Si posees una mascota, verifica que no genere inconvenientes para los vecinos.
La posibilidad de tener una mascota en una vivienda alquilada dependerá en gran medida de lo que establezca el contrato de alquiler. Es fundamental que tanto inquilinos como propietarios conozcan sus derechos y obligaciones para evitar conflictos.
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